A 18 años de jurar sobre «esta moribunda constitución»

A 18 años de jurar sobre «esta moribunda constitución»
Fuente Imagen: Noticias 24

Han pasado 18 años desde que, un 2 de febrero de 1998, Hugo Rafael Chávez Frías se juramento como el 48° Presidente de la República de Venezuela ante el Congreso. Un hombre que alcanzó la fama luego de su fracaso golpe de estado de febrero de 1992, que prometió acabar con la corrupción y fallas de lo que él denominó como la «4ta República». 18 años de un dia que la imagen que acompaña a este texto simboliza a la perfección: el de Rafael Caldera, un viejo y cansado político que simbolizaba el final de la democracia bipartidista, entregando el poder a un joven y carismático Hugo Chávez y a un nuevo régimen político que, para bien o para mal, cambió la historia del país para siempre. Por tal motivo, les traigo el siguiente texto, escrito por el profesor Guillermo Aveledo (y al cual yo solo le di título), que nos recuerda lo mucho que han cambiado las cosas en estos 18 años de chavismo. Muchas gracias a su autor por el permiso que me brindó para compartir este texto.

18 años…

Escrito por Guillermo Aveledo Coll

Han pasado dieciocho años. Poco menos de la mitad de mi vida, y prácticamente toda mi vida adulta.

La vivencia inmediata hace que uno se olvide del paso del tiempo. Por entonces yo me encontraba terminando el tercer semestre de Estudios Políticos, y tenía poco más de veinte años. Estaba en mi primer noviazgo largo, con una hermosa persona que ya no está en el país (y no había conocido aún a la hermosa persona que es mi esposa).

Obviamente, en mi hogar familiar -aún vivíamos allá todos- no éramos afectos a este cambio; casi nadie de nuestro círculo cercano lo era, de modo que era un tiempo de recogimiento y preocupación

Escuché el discurso de toma de posesión de Hugo Chávez en una TV en el Instituto de Estudios Políticos, e hice una caricatura alusiva en la pizarra del cubículo. De entre mis profesores, los escépticos y los críticos sólo vieron confirmadas sus aprehensiones (aunque con desacuerdo sobre la causas del problema ante ellos), y de los partidarios pocos quedan en aquella acera, no obstante la continuidad de su ideal. No recuerdo a nadie planteando «este no pasa del año»… En la UCV había, no puede negarse, un ambiente de expectativa, de jolgorio de comienzo de régimen que me era desagradable entonces y que no he vuelto a ver. Devolverían pronto el Jardín Botánico a las Autoridades universitarias, regresó Castro al Aula Magna, y se impuso una breve luna de miel ante un gobierno que muchos tenían por ucevista, tomado de la mano del rector Díaz. Faltarían dos años para «la toma», y ya sabemos…

Henrique Capriles tenía unas pocas semanas de presidente de Diputados, ¡electo como independiente por Copei en el Zulia!. Henry Ramos era diputado, como también lo era Nicolás Maduro… Manuel Rosales era alcalde de Maracaibo.

Ese mismo día se juramentó el primer gabinete. Dijo entonces el presidente Chávez que había muchos ministerios. ¿Quién queda afecto al chavismo en ese grupo inicial? Obviamente José Vicente Rangel… ¿Grúber Odremán? Miquilena está muerto, y rompió con Chávez hace mucho tiempo.

Mucho tiempo.

A la toma de posesión vinieron varios presidentes de la región: Alberto Fujimori, Ernesto Zedillo, Carlos Saúl Menem, Andrés Pastrana, Hugo Banzer, Janet Jagan, Raúl Cubas, José María Sanguinetti, Leonel Fernández, Fernando Henrique Cardoso, y hasta Felipe de Asturias. Y, claro, Fidel Castro.

En el mundo, las caras eran otras: Tony Blair era el flamante primer ministro británico, y Bill Clinton en su penúltimo año como presidente de los EEUU. Rusia iniciaba el que -no sabíamos- sería el último año de Boris Yeltsin. Gerhard Schroeder era el nuevo canciller alemán, y Massimo D’Alema recién iniciaba su corto gobierno en Italia. Era papa Juan Pablo II, y secretario general de la ONU, Kofi Annan. Suráfrica recién terminaba con los trabajos de la Comisión de Verdad y Reconciliación, e Irlanda del Norte finalmente se encaminaba a un gobierno de coalición pacífico.

Israel y Palestina… Bueno, no todo cambia.

Entonces, Cardenales de Lara dominaba el campeonato de béisbol local, mientras y los Yankees venían de ganar la Serie Mundial contra los Padres de San Diego (que más nunca han llegado tan lejos), habiendo pasado la temporada con la entonce idílica y hoy repudiada competencia de jonrones entre Mark McGwire y Sammy Sosa (quien regalaría un bate al presidente Chávez). Francia era Campeón Mundial de Fútbol, y el Real Madrid era campeón de Europa.

No habíamos casi explorado Marte, y faltarían siete años para enviar la sonda «New Horizons» a Plutón.

Apenas habían dos millones y medio de sitios de internet en el mundo, y sus usuarios apenas pasábamos de 200 millones. Apple tenía como principal producto la iMac y el Power Macintosh, a dos años del iPod y a más de un lustro del iPad. Windows 98 era el sistema operativo dominante, así como Explorer el navegador favorito, con Hotmail como el proveedor de correo más importante. Google tenía meses. ABA de CANTV tenía poco menos un año. Telcel y Movilnet trajeron los teléfonos Nokia, pero aún para muchos era una extravagancia tener un aparato así.

En TV, los niños veían la últimas temporadas de «El Club de los Tigritos», el «Laboratorio de Dexter» y las «Chicas Superpoderosas». RCTV existía, y en Venevisión estaban los programas de opinión de Napoleón Bravo y Nelson Bocaranda. En Televen pasaban series norteamericanas como «Ally McBeal» y «NYPD Blue», con el programa de Luis Chataing y Érika de La Vega para cerrar. No muchos venezolanos sabíamos de «Los Soprano», pero la TV por cable ya se hacía más general. «100 años de Perdón», «Amaneció de Golpe» eran las películas venezolanas de mayor renombre, viniendo «Huelepega» unos meses después, pero en el cine veníamos de ver «Shakespeare enamorado», «Salvando al Soldado Ryan», «El Show de Truman», «Loco por Mary», «El Gran Lebowski» y «La Vida es Bella» (no habían salido ni «Sexto Sentido», ni «Toy Story 2», ni «Matrix», ni «La Bruja de Blair», ni «La Amenaza Fantasma»). Los sonidos pop eran dominados por bandas de jóvenes, como Backstreet Boys, y por el «pop latino», cuando Ricky Martin era mercadeado como ídolo hetero (metro)sexual. El fenómeno de Harry Potter apenas comenzaba, y CSI no era una serie sino el Centro San Ignacio, que junto con el Sambil iniciaron la nueva era de oro de los centros comerciales caraqueños, delimitando aún más al «Este».
La inflación venezolana de 1998 fue de dos dígitos bajos, y si mal no recuerdo con 1000 Bs. de entonces podía mantenerme un día de austera vida estudiantil. Eso era aproximadamente 1.8 US$. El barríl de petróleo venía de estar a 8 US$, subiendo a 12 US$ el primer año del mandato de Hugo Chávez.

La pobreza tocaba a 45% de la población. Los homicidios eran la séptima causa principal de muertes en Venezuela.

Mis cuatro abuelos estaban vivos. Todos mis primos y mis hermanas estaban en Venezuela. Yo era el único que había vivido afuera, hasta entonces.

Muchos de los aspectos y personas más relevantes de mi vida entonces no existen ya a efectos de mi realidad cotidiana, y algunas de las más importantes de hoy me eran impensables entonces.

Qué régimen tan largo.

Escrito por Guillermo Aveledo Coll. Originalmente publicado en Facebook y traído a ustedes por The Digital Questioner con permiso de su autor.